Viviendo la vida de dominación, y disfrutando cada momento de ella, domino a las mujeres lo que las convierte en herramientas sumisas en mi mano. Note que no estoy hablando de aquellos que quieren probar algo nuevo y obtener algo de experiencia, ya que trabajo tanto con principiantes como con jugadores experimentados, experimentando con fronteras de los sentimientos potenciales – sensaciones de placer y dolor.